¿Qué hubiera sido de Chimo Bayo sin su tabla de mezclas en los 80 y 90? Marcó a toda una generación y llegó a ser el disc-jockey más conocido del panorama nacional con su ‘techno’ y ‘electropunk’, pero nada de eso hubiera sido posible de no ser por el físico Werner Meyer-Eppler, el ingeniero de sonido y compositor Robert Beyer y el periodista y musicólogo Herbert Eimert, los padres del primer estudio para música electrónica.
Tal y como recuerda hoy Google (18 DE OCTUBRE DE 2017) al mundo, hace 66 años que se puso en marcha en primer laboratorio de ideas del que beberían miles de músicos de todo el mundo. Fundaron el bautizado Estudio de Música Electrónica, ubicado en las instalaciones de la Radio de Alemania Occidental de Colonia, tal día como hoy pero de 1951. Ese día tomaron la decisión de ponerse manos a la obra, pero aún tardaron dos años en materializar el proyecto que habían imaginado con un concierto electrónico.
Músicos experimentales de todo el mundo acudieron al estudio de música electrónica de Colonia
De aquel estudio nacieron las bases de la actual música moderna, donde se intercalan sonidos sintetizados electrónicamente con la pericia del músico que se pone al mando de la tabla de mezclas. Artistas y productores innovadores se sintieron atraídos por el nuevo estilo musical que nació en aquel estudio y acudieron al laboratorio para empaparse de ideas y hacer todo tipo de pruebas.
Pero, ¿qué es exactamente un estudio para música electrónica?Básicamente es el lugar donde los artistas pueden crear ritmos innovadores editando y mezclando sonidos muy diferentes a los tradicionales. Para ello usan equipos técnicos que se innovan cada poco tiempo y también emplean una composición técnica nunca vista anteriormente.
El Estudio de Música Electrónica de Colonia siguió operativo hasta el año 2000. Hasta entonces allí se trató de llevar este nuevo estilo a límites impensables y surgieron nuevos sonidos e ideas que luego se han ido popularizando en las discotecas de música electrónica de todo el mundo.
El colorido doodle de hoy, obra del ilustrador alemán Henning Wagenbreth, trata de resumir el estilo de vida que marcó la música electrónica en varias generaciones. Es todo un canto a la diversidad de pensamiento e imaginación que se vivió en el estudio de Colonia. Sin este estilo los festivales como Tomorrowland, Ultra Europa, Electric Daisy Carnival o el Sónar no tendrían ningún sentido.
VIA: ELMUNDO.ES